A finales del siglo XX, creció el interés en el cannabis como medicina. Algunos estudios sugerían que podía reducir las náuseas, aliviar el dolor crónico y disminuir síntomas de condiciones como la epilepsia o la esclerosis múltiple. En respuesta, algunos estados comenzaron a aprobar leyes de marihuana medicinal, permitiendo a los pacientes acceder al cannabis bajo la supervisión de un médico.

La marihuana medicinal se diferencia del uso recreativo en su desarrollo y regulación:

Marihuana Medicinal

• Las variedades pueden seleccionarse para diferentes equilibrios de THC y CBD.
• Los programas suelen exigir pruebas de laboratorio para medir potencia, revisar contaminantes y asegurar empaques consistentes.

Marihuana Recreativa

• A menudo se cultiva para maximizar el THC y producir un efecto más fuerte.
• La supervisión varía según el estado, y los productos no siempre son estandarizados.

Por Qué Importa

El crecimiento de las leyes de marihuana medicinal marcó un punto de cambio. Por primera vez en décadas, el cannabis fue reconocido formalmente por su posible valor médico.

Pero el hecho de que cada estado creara su propio sistema —sin un estándar nacional único— abrió la puerta a conflictos continuos entre las políticas estatales y las reglas federales.